Comienza el circo: una travesti barbuda, finalista para ir a Eurovisión

Como cada año llega la temporada eurovisiva con las primeras preselecciones, y mientras en España nos faltan meses para saber con qué cuadro de preselección nos sorprenden este año, o si eligen a dedo a artistazas como Las Ketchup, en otros países ya empiezan a desfilar las primeras travestis que prácticamente viven para Eurovisión.

Ha sido Austria uno de los primeros en presentar a sus finalistas, una lista de nombres irrelevantes que estarán en la final nacional como teloneros de la que tiene que ser la vencedora: Conchita Wurst.

Conchita Salchicha no es como puede parecer a primera vista una folclórica que lleva dos días sin pasarse la cuchilla, sino una travesti con su barba perfectamente recortada como sabe que nos pone mucho en la redacción de El Cajón Desastre. De hecho, ésta se diferencia claramente de las travestis españolas que se matan por ir al Festival, porque además de ser travesti, sabe cantar.

Conchita Martínez ya había participado en otro reality en su país, pero ha sido Die Grosse Chance (La Gran Oportunidad) el que le ha dado sus 15 minutos de fama y poder cumplir el sueño de toda travesti: 3 minutos de éxtasis ante toda Europa con una canción fresca y superbailable, con una puesta en escena rompedora, con mil cambios de vestuario, ventiladores y purpurina.

El éxito de Conchita servirá de inspiración para la horda de travestis que se preparan ya en nuestro país para el acontecimiento del año, y que acudirán masivamente a la barbería para recortar sus barbas y estar a la moda. ECD informará puntualmente sobre todas ellas, pero de momento no podemos dejar de escuchar a Conchita.

Y debido a que este año Eurovisión se traslada Azerbaiyán (Asia) a y se transforma en Asiavisión, ya empiezan a confirmarse los distintos cantantes asiáticos que participarán, como la indonesia Anggun, que representará a Francia. Si alguna travesti no lo impide, TVE seguramente elegirá a Two Yuppa, que ya intentó ir a Eurovisión. Siendo una edición tan cosmopolita, el Festival también ha despertado interés intergaláctico, y un Alien que ya ganó hace años va a volver a intentar repetir su victoria para llevarse el contest aún más lejos. Charlotte Perrelli, vencedora en 1999 bajo su nombre de terrícola, regresó hace 3 años cuando se pegó un sonado batacazo, para desesperación de los eurofans que ya la habían coronado como la alcaldesa perpetua del Festival. Charlotte participará este próximo año en la preselección sueca, sobre la que también informaremos con detalle.