Si a estas alturas el año pasado disfrutábamos de dispares eurodramas como la baja por deshidratación de Ruth Lorenzo o el robo del pasaporte y las maletas de Suzy la Portuguesa, el tedio, la murria y el hastío han predominado en estas semanas preeurovisivas, tanto en las vidas de los competidores como en las apuestas de pago.
Abróchense los cinturones porque nuestro tradicional repaso de los participantes les dará su merecido por obsequiarnos con semejante inapetencia por la chicha eurovisiva. Como siempre, pinchando en cada país llegarás a su videoclip oficial y como novedad, al lado, la cotización en las apuestas para ganar el Festival..
MOLDAVIA (250/1)
La Andorra de Rumanía se ha realquilado a Ucrania. Aunque por esta simple frase el Colegio de Politólogos y Sociólogos debería otorgarnos YA un premio a la divulgación sociopolítica de Europa, nos limitamos a reflejar que la no participación de Ucrania (el país que nos regaló a Ruslana, Shady Lady y a la hermana perdida de Regina Do Santos bailando como un gorila) por sus movidas internas, se ha traducido en que un He-Man/El Señor de las Bestias de 22 años de esa nacionalidad represente a sus vecinos. Numerito digno de aquel antro llamado «La Ostra Azul» de La Loca Academia de Policia.
ARMENIA (100/1)
A estos no se les ha ocurrido mejor idea que denunciar el genocidio armenio por parte de los turcos con cantantes de los 5 continentes. Y nos ha parecido fatal que no hayan incluido a Cher, Aznavour o System of a Dawn. «Don’t deny» se titulaba originalmente la canción, que ¡AY! rima sospechosamente con GENOCIDE. Al menos Verka Serdushka (Ucrania, te echamos de menos) se lo curró con aquel Lasha Tumbai/Russia Goodbye de 2007. ¿Os imagináis a los Supersingles cantándole al bombardeo de Guernica? Pues eso.
BÉLGICA (50/1)
Al igual que Jorge González, el belga Loïc Nottet tiene mucha quedó segundo en La Voz. Su audición a ciegas de ‘Diamonds’ fue memorable y su versión de ‘Chandelier’, realmente turbia. Con 19 años tenemos que agradecerle el tema más arriesgado de este año y que su buena relación con el azerí haya activado todos los radares de Faro a San Petersburgo. Tras la muerte de la Reina Fabiola, Bélgica se ha puesto eurovisivamente morbosa. Y nos gusta.
pluma
PAÍSES BAJOS (150/1)
Su subcampeonato del año pasado ha motivado a muchos países a enviar dúos mixtos como si fuera la receta del éxito. Nosotros hace 40 años que enviamos a Sergio y Estibaliz y sabemos que no. Eurovisión vive una segunda juventud en los dominios de Máxima Zorreguieta y por tercer año consecutivo otra solista de éxito allí se ha apuntado al convite. La veterana Trijntje (pronúnciese ‘Treintie’, aunque aquí los Eurofans Folklóricos la llaman Trini) ha conseguido que un tema simplón cobre personalidad. Atención al velo de viuda negra que lucirá al comienzo.
FINLANDIA (18/1)
Tarde o temprano iba a ocurrir – como ocurrirán las monjas, el cura o la cantante con hiyab – que un grupo de discapacitados mentales diagnosticados ( importante la precisión) fueran elegidos para cantar en Eurovision. Habrá que añadir en nuestro drinking game las referencias a Lordi que harán tus invitados a la Europarty. «Las víctimas son la parodia de la sociedad» y este punk que dura 87 segundos bien merece que termine con los miembros de la banda tirando copas mirando a Bratislava.
GRECIA (100/1)
Quién te ha oído y quién te ve, Hellada. Con lo moderna que has 
sido, con las divas que nos has regalado, con los temazos que hemos bailado… y este año nos traes a una señorona viejoven de pendiente de perla y nombre compuesto. ¿No corrían nuevos tiempos por allí? Tú que has hecho preselecciones en centros comerciales, ¿vienes ahora con esta chipriota rancia ganadora de La Voz? Qué decepción. Ahora sí que Jroña Ke Jroña.
ESTONIA (9/1)
Una de las favoritas gracias a que se ha subido al carro de los holandeses del año pasado con la combinación «Chico/Chica cantan country con aire mohíno». Ella, Elina, nos recuerda a Marilia sin Marta; Él, Stig, al tío chungo que nos pide un piti cada sábado noche. Los arreglos molones de anuncio Martini la hacen accesible y la puesta en escena es de las mejores. Aunque hace años que los bálticos no pintan nada en el panorama eurovisivo, todo lo que sea recuperar el Espírítu de Tallinn 2002 es bueno pa’ ti, pa´ tu cuerpo, pa’ tóh.
MACEDONIA (125/1)
También es el año de ganadores de La Voz y Factor X, ya que el macedonio Daniel ganó la versión adriática de este último hace un 
par de años. Residente en Viena, que a una televisión precaria como la de Skopje le salgan los gastos pagados es un alivio. A pesar de ser uno de los países más deseados para llevar comida en las Europartys españolas, muchos años después de su debut les pasa como a Rosa Lopez en el mundo de la música: todavía no han encontrado su sitio. Y poner a tres negros con gafas de sol a hacerte los coros no es la mejor opción…
SERBIA (100/1)
Bojana (Sí, /bollana/) quedó cuarta en el Serbia Tiene Talento 2012 
y no ha parado de comerse el mundo desde entonces. Viene con mensajito de autoafirmación con traca final de turbofolk (primer momento movido de la noche, por fin) y la banda de ‘Miss Mariliendre Suprema Eurovisión 2015’. Se ha unido a la antigua tradición de grabar en varios idiomas tu eurocanción: imprescindible su versión en la lengua de Caritina Goyanes «El mundo bajo mis pies» dedicada a los que piensan que La Tierra es plana.
HUNGRÍA (100/1)
Autónomos en su forma de entender lo eurovisivo, tras el buenorro anti-malostratos del año pasado, le toca a una especie de Tamara 
Falcó magiar llamada Boggie y su grupo parroquial de catequistas de los domingos lanzar el mensaje (otro más) trascendental de que las guerras no conducen a nada, que los niños sufren y blablablá. Muy mona, muy carina, muy mística, pero que alguien vaya a Budapest y les cuente que la OTI empezó a morir cuando cantantes salvadoreños entonaban «juntemos nuestras manos como hermanos para derribar el muro que está muy duro».
BIELORRUSIA (100/1)
El país que nos ha brindado mamarrachadas como rubias en brilli-brilli saliendo de bolas de discoteca o seguidores de Lady Di cantando por James Bond también se suma a la moda del dúo mixto. Uzari es el nombre de él, que si no fuera por su apetencia de travestirse en hobbit nos parecería atractivo. Ella, la violinista, es Maimona, y su historia personal nos interesa incluso más que la canción. Su padre era de Malí, ella nació en San Petersburgo y se mudó a África pero no pudo con la calor y pidiendo a gritos volver con su abuela bielorrusa debió quedarse muda, porque no abre la boca en ningún momento.
RUSIA (6/1)
Si existiera el patrocinio cultural con las representaciones eurovisivas de Rusia, Lejía Conejo se llevaría el gato al agua. Mujeres cándidas, tonos pastel, calidez vocal y mensajes blancos 
es la fórmula putinesca de combatir la propaganda antirrusa de occidente en las últimas cuatro ediciones. Polina Gagarina, ganadora de Star Factory Rusia hace 12 años, ha tenido tiempo a casarse dos veces, hacer películas y tener un hijo. Donde algunos vemos la versión cantarina de Anna, la mala de la última versión de «V», otros ven a la mejor voz de este año. En cualquier caso y por muchos abucheos que les echen, hace tiempo que los rusos tienen tomada la medida al Festival.
DINAMARCA (100/1)
No podía faltar la banda de chicos jovencitos con gusto por lo retro. Aunque ‘Anti Social Media’ suene a subgrupo ultraconservador del Foro de la Familia que pasa las tardes llenando de reseñas negativas las apps más usadas por nuestros lectores, a los más veteranos de la redacción su canción se nos asemeja a la sintonía de alguna teleserie tipo Padres Forzosos. Cuanto daño ha hecho reponer Grease sin ton ni son. Podrían sufrir la maldición del organizador del año anterior, esa en la que al año siguiente obtienen un resultado fatal.
ALBANIA (66/1)
En el año de los dúos mixtos, canciones con mensaje y concursantes de realities, Albania marca tick en las dos últimas con la ganadora de La Voz Italia 2012. Inicialmente llevaba un truñazo de canción en albanés pero un par de mañanas en youtube le bastaron para c
onvencer a los compositores que retiraran la canción para llevar algo más suyo. Así nació este remedo de Mi Gato de Rosario Flores que habla sobre la autosuficiencia de la mujer. Y a estas alturas con tanto mensajito nos imaginamos a Teresa Fernandez de la Vega, Cristina del Valle y Carmen Alborch bailando abrazadas con Aminatu Haidar esta canción alrededor de una tienda de campaña en Tinduf.
RUMANIA (100/1)
Otros como los griegos que nos han traicionado como Eloisa a Bea la Legionaria en GH6. Antaño alegres y discotequeros, se vuelven sentimentales y ñoños con una canción cuyo único propósito es movilizar la diáspora, ya que habla de los rumanos que se fueron para buscar mejor porvenir a los hijos. En fin, como «El Emigrante» de Juanito Valderrama pero en HD. Siempre han pasado a la final al igual que Rusia. Pero el tema poner maletas y caritas de niños de fondo es un exceso dramático muy prescindible. A ver hasta donde llega este lamento, lamento transilvano.
GEORGIA (70/1)
Cuenta la georgiana Nina Sublatti que compuso esta canción una noche pensando en las mujeres georgianas que se esfuerzan en 
ser madres y educadoras. Tan de noche sería que incluso se ha inventado una palabra en inglés – oximated – y el resto de la letra continúa inmersa en el sinsentido. Pero cualquier le dice nada a Nina, que además es la diseñadora de sus propios tatuajes, porque viene en plan guerrero. Ganadora de Idol Georgia 2013 busca su suerte con este agresivo dubstep tribal.
La primera semifinal tendrá lugar el martes 19 de Mayo. En ella además de los participantes, votarán España, Austria, Francia y Australia. TVE la emitirá en La2 a partir de las 21h.
Todos las imágenes de este post han sido obtenidas del proyecto minipopicons
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