

Escalofriante la historia que se está viviendo en Portugal estos primeros días de 2011: Carlos Castro, uno de los periodistas de sociedad más veteranos y populares del país ha sido asesinado y posteriormente castrado por Renato Seabra, joven exconcursante del programa de búsqueda de nuevos modelos «A procura do Sonho», en la lujosa habitación del piso 34 del Hotel Intercontinental de Nueva York que ambos compartían.
Renato Seabra, de apenas 21 años, procede de una pequeña población cercana a Coimbra llamada Cantanhede. Se presentó al programa de modelos y llegó a la gran final del pasado mes de setiembre pero no ganó. No obstante, Carlos Castro se fijó en él y le envió un mensaje de apoyo a través del perfil de Facebook del aspirante a modelo. Su relación virtual se afianzó de tal manera que Renato veía en el periodista «al padre que nunca tuvo», en palabras de la madre del presunto asesino, Odilia Pereirinha.
A partir del minuto 5.20 puedes ver a Renato en acción en el concurso:
httpv://www.youtube.com/watch?v=E1nckicF1xw
Carlos Castro, de 65 años, convenció al joven para realizar una serie de viajes en los últimos tres meses para presentarle personas influyentes e introducirle en el mundo de la moda a través de sus amistades. La madre de Seabra insiste en que su hijo siempre dejó clara su tendencia sexual: «era heterosexual». Su hermana Joana añade: «salía con novias, no tenía una, tenía varias, es un poco mujeriego».
El caso es que en este tiempo han estado compartiendo hoteles en Madrid, Londres y desde hacía unas semanas en Nueva York. A la familia no les parece extraño que compartiesen habitación: «se trataba de viajes de trabajo, Carlos Castro corría con los gastos y así que esa podía ser una forma de ahorrar». Muy unido a su familia, Renato hablaba a diario con su familia y en los últimos días habían notado algo raro en él: «el viernes comentó que estaba cansado, que dormía mal, que la comida era extraña». Ese mismo día fue encontrado el cadáver del periodista en su habitación. La hermana y la madre de Renato mantienen su inocencia: «alguna cosa muy grave hay detrás, la historia está muy mal contada».
Al parecer la noche del jueves al viernes regresaron de pasar la tarde en los casinos de Atlantic City y ya en el hotel se enzarzaron en una gran discusión. Carlos Castro habló a la mañana siguiente con su amiga Wanda Pires y antes de citarse para comer le comentó que que iba a adelantar el regreso a Portugal ya que tenía miedo porque Renato actuaba como un loco y que el día anterior habían ido a ver «La Red Social» y desde que habían salido del cine, Renato estaba muy raro. Pires posteriormente comentó a la prensa que Carlos tenía una pasión desmesurada por Renato y que incluso había planeado llevarle a Las Vegas como si fuese su luna de miel.
Wanda Pires llegó al Hotel Intercontinental a mediodía del sábado para almozar con su amigo y en la recepción se encontró con Renato que salía algo desorientado. Las palabras de este la llenaron de desazón: «Carlos no saldrá más del hotel». La portuguesa acudió al gerente para comprobar la habitación en la que se hospedaba el cronista, tras observar que nadie respondía, el gerente entró y se encontró una escena dantesca: el cadáver desnudo del periodista, mutilado en sus genitales por un sacacorchos que previamente le había clavado en los ojos y golpeado en la cabeza por un monitor de ordenador.
Renato fue encontrado posteriormente en un hospital a donde había acudido a curarse de cortes en las manos. Unas fuentes apuntan a un intento de suicidio, otras a que trató de defenderse de un objeto cortante. Tras permanecer sedado y bajo custodia policial, sus primeras declaraciones han sido sorprendentes: «Quería liberarle de los demonios y los virus homosexuales». En la declaración también ha reafirmado que no es gay y reconoció haber asesinado y golpeado durante una hora el cuerpo de Castro. Formalmente acusado de homicidio en segundo grado, se enfrentará a una pena de entre 25 años y cadena perpetua.
El pueblo del modelo está conmocionado, en este video en portugués hablan su profesora del colegio, el cura de su parroquia y Vickynha de Culleira una vecina homófoba:
Status social y económico por un lado. Juventud y belleza por el otro. Realities, redes sociales y nuevas formas de mercantilismo relacional. Si aquí no hay un telefilme, que venga Connie Sellecca y lo vea.
Desde elcajondesastre.com envíamos un afectuoso saludo a Josemi y a Mariñas, candidatos espanholes para rodar la versión rojigualda de este dramático fado.
Karl
11 enero, 2011 at 11:11
Pues menos mal que no lo llevó a ver Saw 7.
Pedro Uve
13 enero, 2011 at 10:44
XDDD
quiquelin
11 enero, 2011 at 16:03
Pero por favor qué disparate todo! Igual el viejo intentó violarlo y el otro se volvió loco del coño y acabaron así… lo normal vamos…
Torrales
17 enero, 2011 at 16:06
A ver, llevan 3 meses de gira por Madrid, Londres y Nueva York compartiendo habitación… ¬øy es entonces cuando el viejo (que era quien pagaba la tournée) «decide violarlo»? No me jorobes…
El Mariñas portugués debía comerle todo noche tras noche desde antes de salir de Lisboa. Otra cosa es que el supermodeli debía ser, además de un poco mucho psicópata, un tanto lerdo y tardó todo ese tiempo en darse cuenta de que lo que estaba haciendo no era muy heterosexual que digamos y que a mámá no le iba a gustar cuando se enterara.
El chapero portugués
11 enero, 2011 at 16:14
No quiero que tenga virus de homosexualidad; no, no, no.
Jorge Javier V√°zquez
11 enero, 2011 at 17:36
Fíjate, le puede pasar a cualquiera.
nubetia
11 enero, 2011 at 19:17
Arteeeeeeeeeee!
lawinehouse
11 enero, 2011 at 21:10
No eres t’u, soy yo.
Diego
13 enero, 2011 at 19:12
Yupiiii!!! os he descubierto hoy através de un enlace en «sufridores en casa» y ya formáis parte del (reducido) grupo de blogs indispensables. Desde hoy tenéis un fan nuevo. ¬°Y menuda historia del modelo y el Mariñas portugués!!! Aquí sólo tuvimos a Daniel El-Kum (el profe de supermodelo) que se tiró por la ventana (hay vídeo del acontecimiento).
Barby
13 enero, 2011 at 23:48
Que triste acontecimiento aquel, que se murió el perro, no sé muy bien si porque se tiró con él o qué… tremenda pérdida (la del perro)
tomas
14 enero, 2011 at 11:21
Por dios sí, el perrito, no hay que olvidar al perrito. No hay marica que se precie que se quiera suicidar que no lo haga con un perrito en brazos.
Dr. Anorak
14 enero, 2011 at 0:56
Bienvenidos Diego (me encanta tu nombre) y Barby.
Barbarossa
14 enero, 2011 at 9:30
Barby soy yo. Es que el ordenador no lleva bien lo de recordar usuario y contraseña…