El mundo gay está lleno de prejuicios y estereotipos, no solamente se nos diferencia por nuestras preferencias sexuales, musicales o nuestra forma de vestir. También en el ámbito laboral un trabajo específicamente muy marica nos puede hacer desmarcarnos totalmente de la población activa o población pasiva. He aquí un ejemplo de las profesiones mas maricas.
Diseñador Gráfico
He aquí sin duda una de las piedras angulares en cuanto a profesiones maricas. Desde tiempos inmemoriales, el marica siempre se ha sentido atraído por las artes visuales. Esa sensibilidad que nos caracteriza para apreciar la belleza estética, te ha hecho querer dedicarte al mundo del Diseño Gráfico… Si tus padres tienen pasta probablemente hayas podido hacerte un máster en el I.E.D, pero si este no es el caso, es más que probable que hayas terminado haciendo un FP de Artes Gráficas en el instituto de la esquina cuyos profesores casualmente, son todos licenciados en Ingeniería química… Tus máximas aspiraciones son trabajar en alguna revista de moda o maquetando los faldones y las entradillas de cazamariposas, pero al final te conformas trabajando en negro, diseñando carteles para el bar de travestis de alguna capital de provincias mientras lo compaginas con un trabajo de reponedor en el Dia%. Eso si, siempre intentarás destacar en todas las conversaciones diciendo que eres freelance.
Recepcionista de Hotel
Tu madre siempre te dijo que eras el mas guapo, tus vecinas siempre te han dicho lo majo que eres… Sabes que tienes don de gentes, quieres un trabajo que te permita vestir bien y conocer gente nueva pero no quieres complicarte mucho la vida. Tras pasar por un par de contratos eventuales en el Círculo de lectores, te decides a estudiar algo relacionado con el turismo y te haces recepcionista de Hotel. Tu tarea diaria será hacer check-ins, check-outs y lanzar miraditas cuando viene una pareja gay para correr posteriormente a encender el grindr nada más que se monten en el ascensor.
Azafato Auxiliar de Vuelo
Hablar Idiomas, viajar por todo el mundo con una sonrisa de oreja a oreja. Tu siempre quisiste ser Auxiliar de vuelo. Y por eso te apuntaste a una academia carísima donde te preparaste para ejercer tu profesión soñada. Mientras, los fines de semana trabajabas poniendo copas en un bar de ambiente para poder pagarte los estudios, jurando que cuando sacases el título jamás volverías a aguantar borrachos ni paletos. Enhorabuena. Ahora vuelves a ser camarero, pero en un avión.
Además, la profesión te permite estructurar tu vida en torno al WE Party on tour: París, Tel Aviv, Nueva York, Mykonos… siempre dando fé de ello en tus apps de e-cruising.
Peluquero
Decidiste hacer un ciclo de peluquería y estética, porque de pequeño envidiabas el maniquí de la Barbie de tu prima, el cual sustraías furtivamente para poder peinarlo y destrozarle los cabellos con la tinta de los rotuladores Carioca. Ahora haces lo mismo pero con tu cabeza.
Si tienes suerte y has nacido en una familia rica, tu padre te montará una peluquería para blanquear y de vez en cuando aparecerás en la prensa local, en una foto en pequeñito donde te mencionarán como el peluquero oficial de la Navalcalnero Fashion Night Out. O dirás que eres asesor de imagen de una popstar en ciernes (¡Un beso para Pablo Regueiro!).
Si no has nacido en una familia rica, acabarás trabajando de extra los fines de semana en algún centro de belleza llamado Rizo’s (Sí, siempre con apóstrofe), peinando abuelitas y creando peinados imposibles para novias, damas de honor y similares.
De cualquier manera, como libras los lunes, no te perderás ninguna fiesta dominical, ya sea el Cassette, Qué Trabaje Rita o sucedáneos, extrañándote muchísimo si alguien abandona antes de las 3 de la mañana ya que tu no eres consciente de que no todo el universo es peluquero o camello.
Profesor de infantil
En tu facultad eras el único chico, lo que empezó a levantar sospechas sobre tu condición sexual en tu pueblo. Por suerte, los 3 meses al año que trabajas de interino los vives a tope en la capital de tu provincia, en la que te sientes como en Nueva York incluso aunque se trate de Cáceres.
Trabajas con niños con la convicción de conseguir un mundo mejor haciendo experimentos con tus niños como ponerles canciones de Yurena.
Y si ya eres profesor de inglés, pues es como que unes 2 clichés en uno.
Monitor de aerobic
Por supuesto no nos referimos a esos entrenadores personales con cuerpo fitness que solo existen en Instagram, sino al alegre monitor del gimnasio Curves, todo el día rodeado de mujeres, que prepara coreografías adaptadas a la edad de su público (entre 30 y 80 años) con canciones de Eurovisión sin que ellas lo sepan.
Posíblemente hayan creado un grupo de whatsapp llamado «Gym» en el que la que está a punto de separarse reconozca que le pones perraca y se preguntan entre ellas que cómo se llamaba la canción de esta tarde, como si alguna de ellas fuese a ser capaz de transcribir en perfecto serbio «Ljubav je svuda».
Ayudante de cocina
La gastronomía es otra de esas cosas que más apasionan al homosexual medio. Buenos platos, una preparación exquisita… pero cuidado. El puesto de cheff solamente está destinado a heterosexuales con perforaciones en las orejas. Si eres marica tendrás que conformarte con ser ayudante.
Periodista
Tu meta había sido trabajar en el Hola o en la Superpop, pero la crisis editorial te ha relegado a la sección de sucesos de un periódico local. Con suerte podrás desquitarte ocasionalmente, cuando te manden entrevistar a una Marta Sanchez o a una Soraya Arnelas, que visitan el pueblo con motivo de las fiestas patronales. Tendrás varias cuentas en Blogger y al final te pasarás a WordPress, donde escribirás absurdos artículos sobre cualquier cosa relacionada con el mundo homosexual.
Doblador de camisetas en el grupo Inditex
Nada da mas prestigio que trabajar para Amancio Ortega, pero el camino a Encargado de tienda está plagado de muchas camisetas que doblar. Mientras te tomas tu tiempo trepando en el imperio de la moda gallega, siempre podrás enemistarte con otros homosexuales y demostrar tu inexistente influencia amenazándoles de que se olviden de trabajar en el grupo inditex.
Escaparatista
Un spin-off del anterior: Lo de diseñador de interiores te viene muy grande, pero hay un curso de 250 horas con prácticas incluídas financiado por el sistema Nacional de Empleo que te viene de perlas para vacilar a tus amigas.
En realidad la profesión de escaparatista es un término inventado para los dobladores de camisetas del grupo Inditex de los que después de 3 años de experiencia no se fían para hacer encargados. De esta manera les tienen tan entretenidos creyendo que hacen algo creativo en su tienda, como si todos los escaparates no viniesen dictados al milímetro del departamento de marketing y en su mano estuviese el decidir ALGO.
Teleoperador
Es posible que siemrpe hayas querido un trabajo de los de la lista anterior. También es posible que hayas querido ser todos, pero al final como si de una cruel ley de la naturaleza se tratase, acabarás siendo teleoperador, donde tendrás como compañeros a otros maricas y el 50% restante, señoras de mediana edad que se escandalizarán con tus historias de los ligues de fin de semana.
* Bonus track:
Lesbiana – Soldadora
No queremos hacer discriminación en cuanto a los tópicos laborales en el mundo de las lesbianas, pero lo cierto es que no se nos ocurre ninguna otra profesión. Es más, ¿todavía existen?.
En cualquier caso el trabajo de Soldadora en cadena de montaje de vehículos es todo un clásico y si no, que se lo digan a Raquel Morillas de GH3 Lesbian Edition.
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